Una etapa crítica
Como madres y padres, valoramos las instalaciones, recursos tecnológicos, resultados en pruebas académicas, número de alumnos por aula, etc. Todos son factores fundamentales, pero ¿quién cubre las necesidades de salud de los jóvenes?
En una etapa tan crítica como la adolescencia es fundamental el entorno familiar y social. También lo es la escuela al tener un papel tan fundamental en su socialización. Por ello, es el lugar ideal para que la enfermera escolar les proporcione educación para la salud tanto individualizada como colectiva.
Más del 60% de los chicos y del 75% de las chicas no practica o practica ejercicio menos de dos veces por semana
Fomenta comportamientos saludables (alimentación adecuada, ejercicio físico, higiene personal y ambiental, prevención de accidentes o salud buco-dental) y evita conductas que puedan poner en riesgo su salud actual y futura (adicciones, prácticas sexuales de riesgo…).
Consumo de alcohol y drogas
El alcohol es la sustancia más consumida por jóvenes de entre 14 y 18 años (el 76% lo ha probado alguna vez y el 58% admite un consumo habitual), siendo la edad media de inicio los 13,6 años, con mayores repuntes entre los 14 y 15 años. Existe además una intensa asociación entre los consumos de alcohol, tabaco y cannabis.
La adolescencia es una etapa crítica para el inicio del consumo de sustancias adictivas
Según datos del INE, en 2019 se produjeron en España 1.143 nacimientos con madres menores de 18 años, y en cuanto a las interrupciones voluntarias del embarazo, en ese mismo año fueron 9.410 en chicas de entre 15 y 19 años. Por otro lado, los jóvenes entre 15 y 24 años representan el 50% de los casos diagnosticados de enfermedades de transmisión sexual al año en nuestro país.
Sin duda, la enfermera escolar desempeña un papel necesario para proporcionar una educación sexual temprana, desde la preadolescencia, que aporte una información veraz y adecuada a las diferentes edades y que elimine falsos mitos o creencias erróneas, con el fin de evitar conductas sexuales de alto riesgo.
Esta educación para la salud se realiza no solo con los y las adolescentes sino con toda la comunidad educativa, desde su propio entorno y su contexto socio-cultural.
El problema del acoso escolar continúa siendo una realidad extendida en España, donde uno de cada tres niños y niñas reconoce haber sido testigo de una situación de acoso escolar. Según datos de la Fundación ANAR, más del 50% del acoso escolar o bullying, y el ciberacoso surge en el aula. Uno de cada cuatro casos de acoso escolar es por ciberbullying.